¿Qué me cuentas?
Si quieres decirme algo sin necesidad de suscribirte y esas cosas que hasta a mí me aburren, esta es la manera más sencilla que se me ocurre (aunque delante de un par de cervezas siempre es mucho mejor).
Sólo te pediré tres cosas: un nombre (o un nick, un seudónimo, un nombre en clave…), un e-mail para poder contestarte y, por supuesto, que me cuentes lo que quieras. A ser posible sin insultos, que si suenan mal por la calle, imagina cuando los ves por escrito. Además, doy por hecho que los dos o tres que me leéis sois personas educadas y con buen gusto.

