Relatos

Una división

Todas las divisiones son aleatorias y subjetivas, y esta de los relatos, como mía, lo es aún más.
Quizás te sea más fácil seleccionar en qué tipo de historia quieres sumergirte si, al menos, no te las presento todas juntas y revueltas.

De todas formas, siendo algo mío, estas divisiones pueden cambiar de la noche a la mañana, y sin ningún criterio aparente o entendible salvo para mi pobre neurona. Espero no darte dolores de cabeza. Si es así, desde ya, te pido disculpas.

Espejos

Los espejos nos reflejan tal y como somos, sin filtros, aunque no queramos admitirlo o no nos reconozcamos en la imagen que nos mira desde el otro lado.

Ventanas

Miramos a través de las ventanas para ver más allá, para huir del interior y abrirnos al mundo, para que nos bañen el calor del sol o la luz de la luna. Para que nos acaricie el mundo.

Distorsiones

Cuando ponemos un pie en la realidad y otro en lo extraño, lo mágico, lo fantástico, lo desconocido… pueden producirse distorsiones. Y, aún así, nos sugieren cosas sobre nosotros mismos.

Redención

Redención no existe… o sí.
Nadie ha visto el pueblo, pero hay gente que vive en él.
Hay leyendas, mapas, rumores…, pero no hay historia. O sí la hay, pero no se cuenta. Redención desapareció una noche, pero aún dicen que sigue existiendo…

Diario de un apenao

¿Qué puede salir mal? Las vacaciones soñadas: la persona amada, un crucero, todo pagado, unos destinos de ensueño… y tiempo, mucho tiempo para disfrutarlo todo.